DECISIÓN

POR: BOB PROCTOR

Hay un solo movimiento mental que tú puedes hacer y que, en un milisegundo, resolvería enormes problemas. Tiene el potencial de mejorar casi cualquier situación personal o de trabajo que puedas encontrar… y puede, literalmente, impulsarte por el camino de éxitos increíbles. Tenemos un nombre para esta actividad mágica, se llama DECISIÓN.

Las decisiones, o la falta de ellas, son responsables de la ruptura o la realización de muchas profesiones. Las personas que se han vuelto muy competentes en tomar decisiones, sin que las opiniones de los demás las influyan, son las mismas personas cuyos ingresos anuales caen en la categoría de seis y siete cifras. Sin embargo, no sólo tus ingresos se ven afectados por las decisiones; toda tu vida está dominada por este poder. La salud de tu mente y cuerpo, el bienestar de tu familia, tu vida social, el tipo de relaciones que desarrollas… todo depende de tu capacidad para tomar decisiones acertadas.

Pensarías que cualquier cosa tan importante con la toma decisiones, cuando tiene un poder de gran alcance, se enseñaría en todas las escuelas, pero no es así. Para agravar el problema, la toma de decisiones no sólo falta en el plan de estudios de nuestras instituciones educativas, sino que hasta hace poco también ha estado ausente en la mayoría de los programas empresariales de capacitación y recursos humanos disponibles.

Entonces, ¿Cómo se espera que una persona desarrolle esta capacidad mental? Simplemente, debes hacerlo por tu cuenta. Sin embargo, creo que es importante comprender que no es difícil aprender a tomar decisiones acertadas. Armado con la información adecuada y sometiéndote a ciertas disciplinas, puedes convertirte en alguien que toma decisiones de manera muy eficaz.

Puedes eliminar virtualmente el conflicto y la confusión en tu vida si te vuelves competente en la toma de decisiones. La toma de decisiones trae orden a tu mente y por supuesto este orden se refleja en tu mundo objetivo… tus resultados.